INTERCESORA DE DIOS

USA MIS MANOS SEÑOR

Una mujer entendida de Dios , pero con un deseo no cumplido, que no dejó que su alma se cargará de angustia y apagara la llama de su pasión por Dios. La sunamita de 2 Reyes 4.8
Sunem, una zona productiva, al sur de Galilea, aproximadamente a 30 km del Monte Carmelo, en la llanura baja de Jezreel, ahí vivía la sunamita con su esposo.
El profeta Eliseo pasaba por ahí, ella le insistía viniese a comer y el profeta cada vez que pasaba por ahí comía en casa de la sunamita.
¿Oraste alguna vez : Señor usa mis manos?
¿Pensaste lo que ministras al preparar comida para bendecir a otros ?
Esta mujer sabía , supo cómo administrar y ministrar lo que Dios le había dado: un espíritu de servicio. Ella lo desarrolló siendo hospitalaria con un varón de Dios. Se dejó guiar por el Espíritu Santo y obedeció.
A pesar que en su corazón estaba una expectativa no cumplida que era tener un hijo pero ella seguía creyendo y sirviendo con gozo a Dios.
Años atrás Elías decía ser el único que quedaba para predicar de Dios pero estaba esta mujer que no había doblado sus rodillas a Baal a pesar de no tenia un hijo se mantuvo fiel.
¿ Cuando no llega lo que esperas , que sucede en tu corazón?¿ Sigues alabando a Dios?
¿Seguís sirviendo y honrando la familia de la fe?
¿Bendices con gozo a otros?
Desató un milagro para su hogar está sunamita, a construir un aposento para el profeta. Ella construyó primero en su corazón una habitación para oír a Dios porque está actitud nos dice que ella pasaba tiempo a solas con Dios por lo que lo vio necesario para Eliseo, el profeta, tuviese su lugar y pudiese llevar la obra que Dios le había enviado.
Está escrito: El que recibe a un profeta por cuánto es profeta, recompensa de profeta recibirá… Mateo 10.41
Esta mujer usó lo que tenía en su mano. Ministró al profeta. Una mujer sujeta, ella le dice a su esposo ” hagamos” lo incluye en el proyecto y Dios la respalda.
Cuando pensamos y nos ocupamos por lo de Dios , Dios se ocupa de lo nuestro porque Dios no es deudor de nada ni de nadie.
Eliseo la reconoce cómo mujer de Dios y honra el ministerio de esta mujer, un ministerio en lo secreto, hospedando, siendo hospitalaria pero Dios que todo lo ve, un día mando que Eliseo pasará por ahí, porque Dios ya había visto ese corazón dispuesto a dar y servir. Dios usó a Eliseo para mostrar en público esta mujer que oraba en secreto.
Quizás hoy sirves o hacer cosas para el Señor y nadie lo ve , ni lo reconoce pero hay un día que llega la voz de Dios y te trae honra y milagro, porque nada es oculto para Dios.
Sigue tu tarea fielmente porque Dios tiene honra para tu vida.
Dios te bendiga 🙏

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