Devocional

Somos uno en Cristo

“ESCOGED DE ENTRE VOSOTROS UN HOMBRE QUE VENGA A MÍ”
La voz del infierno a través de Goliat en 1 Samuel 17.
Palabras que el gigante gritaba al pueblo de Israel.
Tiene que ver que las tinieblas buscan siempre que sigas sus planes y pelees bajo su gobierno. Goliat lo intentó desde el principio. Él mismo presentó como sería la guerra, de a
uno y no como uno, no como ejército, sino que el filisteo quería enfrentamiento
individual y sabemos que individualmente no podemos vencer, porque somos
parte de un ejército , del cuerpo de Cristo y por más que estemos en procesos
personales muchas veces difíciles,no estamos solos porque siempre hay hermanos de la fe que oran a favor
nuestro porque solos no podemos.
La estrategia de Satanás es que lo
enfrentemos solos y así destruirte.
Dios había preparado a David para el valle de Ela.

Otra estrategia de Satanás es que siempre te hará dudar de lo que Dios hizo en vos. Desacreditando tu

madurez , entendimiento y fe.
Eso hizo Eliab, el hermano de David, tratándolo de
soberbio y malicioso queriendo apocar la fe de David.
Te engañará con sus formas. Procurará meterte en un molde para quitarte el
diseño de Dios en tu vida. Te entregará un modelo ya viejo, sin fe, sin revelación
para que no dependas de la voz de Dios. Eso hizo Saúl. Primero le dijo “porqué tú
eres muchacho”, comparando y dejando en inferioridad a David en relación al
filisteo. Saúl puso fe en el filisteo y no en David.
Saúl quiso vestir a David, pero su ropa era vieja para Dios. Él había sido desechado como rey. Saúl no creía que
Dios estaba con David por eso quiso protegerlo con su ropa pero también
influenciar a David que dudara de lo que Dios le había dado para esta guerra.
A David le bastaba el cayado, la honda y las piedras lisas.
Saúl vistió a David, con sus ropas? ¿Para qué? Si Dios era quien había entrenado y
preparado a David.
Más de una vez las “buenas intenciones” estorban al propósito de Dios en tu vida.
Es tiempo de despojarse de vestiduras viejas que llegaron como buenas intenciones pero no salieron del corazón de Dios.
¿Cuáles son esas vestiduras que usas pero no hacen al propósito de Dios?

Y Saúl vistió a David con sus ropas y puso sobre su cabeza un casco de bronce, y
le armó de coraza. Y ciñó David su espada sobre sus vestidos, y probó a andar,
porque nunca había hecho la prueba. Y dijo David a Saúl: Yo no puedo andar con
esto, porque nunca lo practiqué. Y David echó de sí aquellas cosas. 1 Samuel 17.38

Dios te bendiga 🙏

Devocional de nuestro Estudio bíblico ” El valle de Ela”
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