*DISEÑO DE PODER
Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo.
Salmos 55.22
*
En nuestro andar cristiano se forman tormentas por distintas circunstancias que nos toca soportarlas y esperar pasen.
¡Qué pase la tormenta!
¿Cuánto durará está tempestad?
¿Hasta cuándo tormentas en mí vida?
Algunas de las frases que decimos o pensamos.
Dios es soberano sobre toda tormenta o tempestad.
David, el salmista, atravesó tormentas y tempestades. Algunas originadas en su pecado, otras a causa de conquistas sobre sus enemigos y otras porque era necesario que se expandiera su fe.
Este varón se encontraba en medio de la tormenta:
“Me apresuraría a escapar del viento borrascoso, de la tempestad”
Salmos 55.8
David quería escapar del ímpetu y presión de la tormenta.
¿Qué tormenta quieres evitar en tu vida?
¿Has pensado huir de la tempestad?
¿Deseas irte lejos de todo? Y de todos?
Ese deseo de huir, de no querer saber más nada es porque se desatan tormentas en nuestra alma, que golpean fuerte, nos desequilibran, arrasan con lo que creíamos seguro y queda expuesta nuestra debilidad . Debilidad en esfuerzo y valentía, al no querer enfrentar lo que nos toca, frustrarnos en sufrirlo y padecerlo entendiendo que las tribulaciones son pasajeras.
Las tormentas son pasajeras. No son eternas las tempestades.
En el corazón de David, se había soltado una tormenta a causa de la voz del enemigo.
¿Cuántas voces te intimidan? ¿Qué voz provoca tempestad en tus pensamientos?
Era tan intensa y profunda su angustia que hasta su corazón estaba lleno de dolor:” Mí corazón está dolorido dentro de mí y terrores de muerte sobre mí han caído” Salmos 55.4
La tempestad va impactando paso a paso nuestras áreas vulnerables y arrancando las falsas seguridades porque bajo la tormenta es cuando vemos donde estamos cimentados. Vemos donde está nuestra fe.
El Salmista presenta su miedo y terror al Padre Dios, reconociendo que tiene temor y temblor.
¿Has temblado de miedo alguna vez? ¿Sentiste se te movía la tierra bajo tus pies a causa del terror?
¿Te encontraste rodeado o estás rodeado por el peligro?
Así estaba David.
¿Cómo estás hoy?
David declara una verdad eterna, un diseño de poder que es para siempre!
Nos deja “la solución” para atravesar la tormenta del alma:
” Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará;
No lleves vos la tormenta, entregala a Dios. Ora y presenta la situación, aunque sea pecado, entrega a Dios porque Dios va a sustentarte, fortalecerte y sostenerte con su mano de poder y gobierno.
Si la tormenta o tempestad te tiró al piso y caíste en falta de fe, en pecado, en conflictos e obras de maldad, sabes que si dejas tu carga, tu confesión a Dios, para Dios te sustente y sostenga también te levantará por qué escrito está:
” NO DEJARÁ PARA SIEMPRE CAÍDO AL JUSTO”
Ese justo sos vos, quien está leyendo este Devocional, que si llegó a tu vida hoy, es porque Dios quiere enseñorearse sobre las tormentas de tu mente para sustentarte y te levantes para su gloria.
Dios te bendiga 🙏
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