Donde otros no pudieron abrir, abren la brecha y abren camino, los hijos de Dios, portadores de Cristo.
Orar e interceder es Jesús resucitado, es vida!
Tu oración no es un adorno ni un pasatiempo, es muy importante para Dios, en tu boca hay poder (Proverbios 18.21).
Dios dijo:
” Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé. »Yo he buscado entre ellos a alguien que los defienda; alguien que se ponga entre ellos y yo, y que los proteja como una muralla; alguien que me ruegue por ellos para que no los destruya. Pero no he encontrado a nadie” (Ezequiel 22.30)
Que tremenda expresión ” no he encontrado nadie que ore” eso esta diciendo el Señor.
Como hijos de Dios reparamos portillos, edificamos las ruinas antiguas, levantamos cimientos, restauramos calzadas para sean habitables, y todo esto es por medio de la oración.
¿Conoces personas que son como una ruina antigua? ¿Qué nadie se acerca y que no manifiesta vida?
Esa personas “muertas en vida”?
Es tu oración y clamor el instrumento para sacar esas vidas de esa condición y llevarlas a la posición de hijos de Dios.
El Espíritu de Dios ( Isaias 61) está sobre vos. ¿Porqué esperar para orar e interceder por otros? Ya Dios te ungió.
Dios te envió a predicar buenas nuevas, a vendar, a publicar libertad y apertura de la cárcel, esto es abrazar y consolar al que sufre y llora, imagina cuando abrazas a alguien angustiado que tus brazos son vendas con aceite del cielo sanando, consolando. Habla fe, habla esperanza. El mundo ya demasiado habla miedo y espanto. Alguna vez te dijeron que tus abrazos dan paz, que tus consejos ayudaron y mucho más, es porque somos vendas y lazos de amor de Dios, porque damos consuelo del cielo.
Cuando hablas de Dios es cuando tus labios publican libertad a otros. No calles.
Mira a tu alrededor, hay personas que necesitan sean restauradas y es tu oración e intercesión el arma para sacarlas de esos pozos de desesperación.
Hay muchas brechas de bendición, cerradas, como hijos de Dios, nos toca abrirlas. Abrir las brechas de Dios y los diseños de Dios para muchos lleguen al Padre Eterno.
Dios te bendiga 🙏
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