ESPERAR SU VOZ
“Más ahora traedme un tañedor” , pidió el profeta Eliseo.( 2 Reyes 3.15). Se tomó tiempo. No soltó palabra apresuradamente. Primero generó un ambiente para Dios y silenció las voces extrañas con el sonido que tocaba el tañedor.
Eliseo era un profeta temeroso de Dios y esperó a Dios que hablara.
Cuantos ” Dios me dijo” y Dios no dijo nada.
Eliseo no se apuró a dar palabra siendo paciente mandó a pedir un tañedor,
tampoco se dejó influenciar por las palabras de Joram en darle respuesta y esa es característica de profeta, el no hablar lo que al hombre agrada o quiere oír, es hablar lo que Dios dice.
El infierno procura siempre nos apuremos a hablar y tardemos en oír, el antidiseño de Dios, por que Santiago 1.19 dice “todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airearse”
El diseño de Dios es oír diligentemente y esperar para hablar.
Como profeta de Dios Eliseo fue rápido en oír a Dios y esperó para hablar.
Muchas veces exigimos una respuesta a Dios o a nuestras autoridades pero no nos detenemos a oír y esperar pacientemente.
Escrito esta que ” se sentará para afinar y limpiar la plata…”( Malaquias 3.3) por lo que Dios no está apurado, se tomará su tiempo, se sentará y hará.
Nosotros somos quienes precipitadamente damos una palabra pero… ¿Oímos que Dios decía eso?
Eliseo un profeta prudente y sensato. Un hombre temeroso de Dios.
Oía y después hablaba.
Realmente somos pronto para oír a Dios o a otros?
Respondemos teniendo entendimiento o contestamos a la apurada?
¿Generás ambiente para oír a Dios?
Prepara tu corazón para oír a Dios en humildad y obediencia y verás como la voz de Dios llega a lo más profundo de tus entrañas como luz quitando toda oscuridad.
Dios te bendiga 🙏
