¿Quiénes son tus amistades?
Cuando estamos fuera de la luz no vemos nuestra condición como podemos leer en 2 Reyes 3.13 le pasaba al rey de Israel.
Si no entra luz natural a nuestros ojos no vemos, por eso Pablo oraba Dios alumbrara los ojos del entendimiento de los de Efeso. ( Efesios 1.18)
¿Te pasó de juzgar , criticar u opinar sin saber ?
Te exhortaron, te corrigieron y te enojaste porque no veías tu error?
Joram seguía insistiendo que Dios los había reunido para entregarlos al enemigo no podía discernir, porque sus ojos no tenían luz a causa del pecado. El pecado es un lugar de tiniebla, oscuro y sin luz. Tan grande el orgullo de este rey que seguía poniendo responsabilidad en Dios y no veía su propia entrega al pecado. ( 2 Reyes 3.3)
Nos pasa que cuando Dios nos confronta y estamos en caminos oscuros por voluntad propia ponemos argumentos a favor nuestro, obvio, culpando a Dios.
Dios solo desea nuestro arrepentimiento para limpiarnos y sanarnos.
Eliseo, el profeta, sabía con quienes tener un vínculo de amistad y no era con Joram.
Es por eso cuando se presentan a Eliseo,( 2 Reyes 3.13) el profeta le dice: ¿Qué tengo yo contigo?, le está expresando ” no tenemos nada en común nosotros” ” nada nos tiene ligados” ” no somos amigos”.
¿Cuáles son tus amigos?
¿Del mundo o del reino de Dios?
Es tan común que por esa “falsa misericordia” que es nuestra, caemos en costumbres y conductas del mundo, porque son amigos que no conocen y en nuestras propias fuerzas los queremos salvar y terminan sacandonos del camino del Señor.
Pensemos: ¿Cuántos hermanos apartados conoces? Y si le preguntas que pasó, quizás algunos culpan a Dios, como Joram, pero es que hicieron alianzas con el mundo, y es lo que Eliseo le aclara a Joram, que con su vida de pecado no tiene amistad ni alianza.
2 Corintios 6.14 nos habla de yugos desiguales.
Porqué yugos desiguales?
Porque de acuerdo al yugo que llevas sobre tu cerviz es a quien obedeces, por lo que si llevas el yugo de Jesús , obedeces a Jesús, pero si llevas otro yugo… lo puedes entender?
Cuando logramos vernos a nosotros mismos Dios nos toma de la mano y nos ayuda, sin juzgarnos ni condenarnos. La misericordia de Dios no es libertinaje ni permitir todo. Amistad con el mundo es enemistad con Dios. El problema es cuando nosotros nos convertimos a ellos. (Jeremías 15.19)
La misericordia de Dios es justa porque no va en contra de la verdad de Dios.
Sea la luz de Cristo alumbrando tu entendimiento y puedas ver que te habla Dios de este pasaje 2 Reyes 3.
Dios te bendiga 🙏
