QUIERO OIR TU VOZ SEÑOR

Esperamos respuestas y nos cansamos de esperar.
Dios nos prometió que el abrirá camino y ríos en el desierto y en la soledad.
Hay temporadas que nos sentimos ” solos” “vacíos” “que nadie me comprende” ” nadie tiene tiempo para mi” ” que Dios a mi no me habla” y es ahí , cuando en esos pensamientos, llega el soplo de vida de Dios, trayendo lo nuevo de él, abriendo camino en medio de la duda y el temor.
Su voz trae lo nuevo.
Dios habla y te habla. Cuando oyes su voz tu alma no percibe soledad ni ausencia, porque su voz te posiciona y despierta a su realidad.
Su voz abre camino en el desierto. ¿Quizás hace tiempo no escuchas su voz y tu vida se convirtió en un desierto, en un caos? ¿Se secaron tus expectativas, tus ganas de vivir y servir a Dios?
Dios es quien abre tus oídos a su voz , otra vez, y la voz de Dios produce vida y nos da esperanza.
La voz del Padre resucita lo muerto!
Te toca oír, anhelar oír a Dios, buscarlo, así como decía el salmista, que como el ciervo clamaba por aguas, así él clamaba por Dios.
Dios te está hablando!

He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad. Isaías 43.
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